domingo, 14 de octubre de 2007

Blade Runner


La película salió un día en el que Ridley Scott fumaba mariguana en su casa, a finales de los setenta. Se acaba de leer el libro "¿Sueñan los androides con ovejas eléctricas?" de Philip K. Dick, otro autor que también tuvo que gastarse el sueldo de varios meses para comprarse porros. Finalmente el libro resultó ser una obra maestra, y que Ridley, en su inspiración (nunca mejor dicho), decidió usar como película.

La historia se centra en un futuro, 2019, en la figura de Harrison Ford, que por aquel entonces se ha hecho un lifting tremendo y decide cambiarse de nombre: a Rick Deckard. También cambia de trabajo, uno muy porrillero que consiste en decirles a los robots que tiene que jubilarse. Pero resulta que un grupo de ellos se resiste a que les retiren, pues no confían nada en el sistema de pensiones a jubilados (normal). Deckard tendrá que buscarlos, usando su astucia y el test del Voight Kampff y hacerles la eutanasia, ya que los robots ancianos son un peligro para la sociedad. Pero en el camino se enamorará de Rachel, una robot diseñada para no trabajar nada, por lo que no puede ser retirada. Por otro lado hay una robot saltinbanquii que parece un maniquí. Y otro robot llamado Roy, que por todos sus medios evitará que le retiren, o por lo menos no antes de que le aseguren una pensión en lo que le queda de vida. Roy tendrá que buscar a Dios, también conocido como Tyrell para que le asegure su jubilación. Dios le contesta que no puede hacer nada, ya que por ser tan perfecto (refiriéndose a Roy) no es bueno que trabaje más de cuatro años en su vida. Maravillado por su magnificencia, Roy abraza al Dios Tyrell como a un padre, tan apasionadamente, que a éste último se le salen los ojos de las órbitas y muere ( su representación carnal, se entiende).
El Blade Runner Harrison Ford, perdón Deckard, se enfrentará en una batalla final contra Roy, desvelándose aquí una de las escenas más bellas vistas en el cine.


Visualmente, una de las mejores películas de las tres últimas décadas, teniendo en cuenta los materiales con los que entonces se contaban. El ambiente recreado de la ciudad de Los Ángeles, los coches voladores, los edificios, los anuncios publicitarios, los puestos del mercadillo, los anuncios publicitarios, los ropajes de diferentes etnias y modas, los vapores del subsuelo, los salones de fiesta cutres, los mismos replicantes y los mismos blade runners... Un film imprescindible.




3 comentarios:

Jaberwocky dijo...

yo sólo leí el libro, muy bueno, pero de éstos que hay que tener tiempo y ganas de leer.

Onete dijo...

Yo en cambio solo he visto la película. No recuerdo ahora mismo cual de ellas, ya que existen como que 4 o 5 metrajes distintos...no se, perdí la cuenta.

En cualquier caso, la considero una película muy buena, tanto por argumento como por ambientación. Los efectos especiales podrian perfectamente ser de la actualidad, no estan demasiado desfasados. Todos los amantes del cine y/o ciencia ficción, deberian verla algún dia.

Un saludo ^^

Anónimo dijo...

Simplemente fantástica, un clásico, no hay nada más que añadir.
Saludos.
www.sioncity.wordpress.com